viernes, 11 de julio de 2014

9ª Semana de dieta.

Si, ya se que me he saltado una semana, he pasado de la 7ª a la 9ª.

Las últimas casi dos semanas han sido ajetreadas, volver a viajar y no parar por asuntos familiares, laborales y personales han hecho complicado seguir el tratamiento 100%, pesarme y medirme. Aún así sentir que cada día se me caen más los pantalones creo que es buena señal de que la cosa sigue marchando aún sin hacerlo del todo bien. Estos días son los culpables de que el programa de 90 días vaya a durar alguno más, pues no he tomado todos los complementos y seguiré hasta que los termine.

Al llegar a casa me pesé y el resultado fue pasar de 78,9 kg a 78,3 kg, -600 gramos en estos días de locura, a los que se junta la semana fatídica del mes, la del periodo, así que sigo estando contenta con los resultados. Lo que si que he hecho ha sido más ejercicio, así que es posible que parte de mi peso sea una bajada de grasa y subida de masa muscular, la historia es que, sinceramente, no acabo de llevarme bien con mi báscula a la hora de medir los porcentajes, así que no os puedo dar datos reales de ello.

Los pantalones que os comenté la última vez ya me abrochan, sigo sin tener foto, ni tiempo para eso me queda, pero está pendiente.

Ahora ya he vuelto a la rutina y estoy de lleno en esos días de "quiero comer chocolateeeeeeeee", así que la próxima pesada y medida oficial la dejaré para el lunes que viene, a ver si ya veo los 77 y bajando.

Me siento bien, orgullosa de mi misma de sentir de lo que soy capaz, de lo relativamente fácil que me está siendo no alejarme de mis objetivos cuando estoy fuera de casa y relajada. Mi autocontrol, excepto en estos días ñoños, es muy grande, bueno, en realidad no es tan grande pues no me cuesta llevarlo a cabo, no me he privado de tomarme alguna cerveza con mis amigos o comerme una pizza (casera) o un helado, pero lo he hecho conscientemente, calculando las consecuencias y compensándolo con un poquito más de esfuerzo físico y llevando mejor el resto de la dieta. Ahora mis amigos saben que cuando quedamos para cenar ya no me voy a comer una gran hamburguesa, una tortilla de patata o pasta. Dejan a un lado tantos hidratos de carbono y cenamos ricas ensaladas con proteínas ricas, al final ellos también lo agradecen, todo es encontrar alternativas sabrosas a la comida grasienta, rica en hidratos o precocinada. El "hágalo usted mismo" nos ahorra un montón de calorías, es más sano y al final sabe mejor.

La próxima semana más, aunque se vislumbra otro viajecito a la vista... Ya os contaré.

B.J.D.

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