domingo, 31 de marzo de 2013

Tocado con lazo.

 Hoy quiero mostraros otro de mis tocados.
Hice la base de tarlatana y la forré con paño de lana. El lazo está hecho en tela entretelada con tarlatana para darle la rigidez y cosido al cordón, confeccionado con la misma tela, que rodea el contorno del sombrerito. Por dentro va forrado en raso negro y como podéis observar se sujeta a la cabeza con una diadema.

Frente
Perfil
Trasera

 Y aquí la modelo posando con esta pocholada. Queda mucho más bonito en una bonita cabeza que en el maniquí.




Y para las más atrevidas con el lazo por delante :).


Muchas gracias a Lara por servirme de modelo.

B.J.D.

jueves, 28 de marzo de 2013

Torrijas y huevecillos.

 Hoy por ser Jueves Santo os voy a ofrecer un post de cocina.

 En mi casa es costumbre hacer dos tipos de dulce en Semana Santa: torrijas, que son típicas en toda España, y huevecillos, típicos de Extremadura y Andalucía.

 Las dos recetas se elaboran prácticamente con los mismos ingredientes básicos: pan, huevos, leche, aceite (preferiblemente de oliva), limón, azúcar y canela. Las dos eran una forma de aprovechar el pan sobrante. Hoy en día hasta venden pan especial para hacer torrijas cortadito en rebanadas y todo.

 Se conoce la existencia de las torrijas desde el siglo XV que aparecen en los escritos, o sea que a saber desde cuando se hacían sin haber sido mencionadas. Se decía que era una forma de alimentar a las parturientas y que se recuperasen más deprisa, esas torrijas llevaban además miel. A comienzos del siglo XX eran muy típicas en las tabernas madrileñas servidas con un vaso de vino, supongo que de ahí vendrá el dicho de "cogerse una buena torrija".

 Hay muchas variantes de torrijas, las clasicas se remojan en leche cocida con azúcar, canela y cáscara de limón, luego se rebozan en huevo y se fríen. Una vez fritas y escurrido el aceite se vuelven a rebozar con azúcar y canela y se reservan, o se remojan en un almíbar hecho a base de agua y azúcar, aunque hay quién le echa a ese almíbar un poco de vino dulce, anís u otro tipo de licor. Hay quién utiliza las dos cosas juntas, primero azúcar y canela y luego el almíbar. También se pueden remojar después de fritas en miel caliente (mejor un poco rebajada con agua para que esté más líquida) o dejarlas en la leche sobrante a la que le añadimos un poquito de licor. También podemos pasar de la leche y remojarlas desde el principio en vino.
 En mi casa se suelen hacer las clásicas con almíbar, aunque a veces también con azúcar y canela. Estan son las que ha hecho esta vez, con todo :).




 He de decir que esta Semana Santa ya se habían hecho antes que estas otras tres fuentes llenas como la de cristal y desde hace unos años también son típicas en mi casa las torrijas en Navidad, tradición que compartimos, al parecer, con la gente de Cantabria.

 Mi madre, la señora que ha hecho estas maravillosas torrijas, es de un pequeño y precioso pueblo de Zamora que se llama San Juan del Rebollar y suele contar que cuando era pequeña y llegaba la época de hacerlas, para que los niños no estuvieran enredando en la cocina, les mandaban a casa de vecinos y/o familiares a por ingredientes ficticios para hacer las torrijas, como por ejemplo el larigón, así les tenían toda la tarde dando vueltas por el pueblo y no daban la lata.
 Los huevecillos, como ya he dicho, son típicos en Extremadura y Andalucía y mi padre, como buen extremeño, no los perdona ni un año. En algunos sitios también los llaman buñuelos de leche o repápalos de leche, hay que especificar "de leche" pues también existen los buñuelos de viento o los de bacalao y los repápalos salados. No he encontrado información sobre el origen o la antigüedad de este plato, pero estoy segura de que también es antiquísimo.

 Los huevecillos, o güevecillos, son muy similares a las torrijas solo que con el pan y los huevos se hace una pasta con la que se van haciendo pelotitas y se fríen. Una vez fritas y escurrido el aceite se echan a la leche previamente calentada con azúcar, canela, cáscara de limón y de naranja y se dejan cocer unos 10 minutos. Luego se dejan reposar y se comen fresquitos, así es como mi abuela enseñó a mi madre a hacerlos. Ñam.




 Se que en muchos otros lugares del mundo se comen dulces muy parecidos, me encantaría leer vuestros comentarios al respecto.

 Me gusta reciclar y reutilizar las cosas y también me gustan las tradiciones, por eso este me pareció un post ideal para mi blog. Y ahora me voy a saltar la dieta y a endulzarme el día ;).

B.J.D.

miércoles, 27 de marzo de 2013

Kokeshi amigurumi.

¿Conocéis las muñecas kokeshi? Seguro que sí, desde hace un tiempo se han puesto muy de moda y se ven por todas partes, pero ¿sabéis lo que son?

"Las kokeshi son muñecas tradicionales japonesas, originarias de la región de Tohoku al norte de Japón. Se fabrican a mano utilizando madera como materia prima y se caracterizan por tener un tronco simple y una cabeza redondeada pintada con líneas sencillas para definir el rostro; el cuerpo tiene diseños florales y no poseen brazos ni piernas. La parte inferior generalmente está marcada con la firma del artesano."
(Sacado de la Wikipedia)

Actualmente podemos encontrarlas, o al menos versiones de ellas, hechas con todo tipo de materiales. Yo os voy a enseñar dos de las que yo he tejido a ganchillo. Utilizando un patrón base sabes cómo empiezas pero nunca como terminas. Según voy tejiendo la muñeca me va dando pistas de como quiere ser acabada. Estas por ejemplo tienen brazos, algo que las kokeshi originales no tienen.


 Aquí os dejo el patrón. Lo saqué hace tiempo de internet pero no recuerdo de qué página, si alguien lo reconoce que me lo diga para incluír la fuente, no quiero adjudicarme la autoría de algo que no es mío. Es un patrón muy sencillo para poder iniciarse en el arte del amigurumi.


 La siguiente es una modificación del mismo patrón. Una vez hecha la base sólo tienes que echarle imaginación para personalizar tu kokeshi.


Espero que os haya gustado el post de hoy, que os animéis a realizar vuestras propias kokeshi y me lo contéis. Si tenéis alguna duda me lo decís y yo os ayudaré en la medida de lo posible. 

B.J.D.

viernes, 22 de marzo de 2013

Corazón de primavera

Esta semana le quería hacer un pequeño homenaje a la primavera, que ha llegado con sol, subida de la temperatura, luego bajada, lluvia, granizo, luego sol... Y todo eso en dos días :).

He fabricado un pequeño jardín en forma de corazón para poder tener todo el año un trocito de primavera dentro de casa.
Estos son los materiales. Venden unas rejillas especiales para hacer alfombras, pero yo tenía por casa un resto de este otro tipo antideslizante que se usa para poner debajo de ellas y es lo que he utilizado. En este caso es una pieza pequeña, pero si queremos hacer una alfombra grande podemos utilizar lo mismo que yo para hacerla más flexible, antideslizante y lavable. La lana verde también la tenía por casa. He utilizado un ganchillo (que luego cambié por otro más pequeño al resultarme demasiado grueso) pero también venden una aguja especial para este tipo de trabajo. Yo tengo una, pero no la encontré así que, como siempre, me apañé con lo que tenía a mano.


Corté la lana en trozos de unos 7 cm. ayudándome con una libreta pequeña para coger la medida, y fui anudando una por una las hebras hasta cubrir por completo la forma de la rejilla.


Y este es el resultado. Una vez terminado solo tuve que regarlo y ponerlo al sol para que la primavera hiciera su magia...


...¡Y le salieron margaritas! :D


 Mirad cómo destaca sobre fondo negro.


Había que buscarle una buena ubicación al corazón primaveral y probé a ponerlo en la puerta. Queda precioso para recibir la nueva y florida estación.


 Aunque al final decidí ponerlo en mi habitación, en un huequecito de la pared que estaba pidiendo a gritos un poco de color.


Mi madre, que todos los días está muy atenta de cada labor que empiezo, me dio la idea de aplicarlo en un bolso, quizá lo haga. Un trabajo como este tiene muchas posibilidades, solo hay que echarle imaginación y demostraremos que con esta técnica no solo se pueden hacer alfombras y cojines.

 Espero que os haya gustado. Todos mis trabajos los hago con mucho cariño, pero este me ha hecho especial ilusión, no se por qué, será que me encantan las margaritas...


B.J.D.

miércoles, 20 de marzo de 2013

El último punto.

Hoy simplemente os voy a poner un vídeo que he encontrado por la red. Se lo dedico a todas esas tejedoras compulsivas que hay por ahí, seguro que os sentís muy identificadas con él, aunque bien se lo podría dedicar a todas las personas creativas que no pueden estar paradas sin hacer algo con sus propias manos, a mi me ha pasado y últimamente me pasa mucho, si un día tengo ganas de tejer y decido ponerme y no tengo la lana que necesito busco cualquier otra cosa, un cordón, una cuerda, tela... Da igual, la cuestión es crear algo cuando te da el impulso, algo así como un "braimstorming", aunque quizá habría que llamarlo "handmadestorming" :). A veces las cosas que no están planificadas acaban teniendo unos resultados realmente sorprendentes.

Disfrutad con el vídeo. 




B.J.D.

lunes, 18 de marzo de 2013

Tocado de plumas.

Un día vino de visita a mi casa mi amiga Blanca. La llevé a mi taller recién estrenado, le enseñé los sombreros y tocados que estaba haciendo y le hablé de las ideas que tenía. Le gustó tanto lo que vio y lo que le conté que sin dudarlo me hizo el primer encargo.

Quince días después tenía una boda y le apetecía llevar un tocado. Quería algo muy sencillo, que fuera resultón y elegante pero que no llamara demasiado la atención (ella es muy discreta). Me dijo que no fuera aparatoso ni difícil de poner, que no quería plumas, ni gorritos, ni grandes lazos, ni redecilla, ni... Vamos, que me lo ponía difícil. Al final le dije que confiara en mí, que le haría un tocado con el que se sintiera a gusto.

A la semana la llamé para que viniera a recogerlo y he de decir que le encantó.

Le hice un tocado de plumas en diferentes tonos de verde y negro, para que fuera acorde con el vestido y los zapatos, con un detalle de cuatro perlas artificiales también en verde engarzadas en un soporte de lazo de raso negro y sujeto con una diadema.




Y aquí está Blanca con su tocado. Aún estoy esperando las fotos de la boda para ver el estilismo completo :). B.J.D.



 B.J.D.

Bolsas para tabaco de liar.

Cada vez hay más fumadores que se pasan al tabaco de liar, sobre todo desde que el precio del tabaco es tan elevado, cuando yo fumaba solía alternar por temporadas el tabaco de liar con el de cajetilla y es un rollo tener la bolsita, que casi siempre se abría dentro del bolso, por una lado y el papel y las boquillas por otro, sin contar con lo difícil que es encontrar a veces el mechero...

 Atendiendo a esa necesidad de organización me hice una bolsita para llevarlo todo junto. No tiene un gran acabado, en realidad la hice de prueba pero al final la usé muchísimo.

 La bolsa está hecha con loneta de algodón y peluche, consta de un bolsillo grande en el que meter la bolsa de tabaco, uno más pequeño para meter el mechero o las boquillas y compartimento dosificador de papel.


Interior.

 El sitema para cerrarlo es cierre de cardillo (o lo que la mayoría de la gente conoce como Velcro), dando la vuelta la solapa hasta la parte de atrás. Este sistema permite acomodar el tamaño de la bolsa contenedora al del paquete de tabaco que tengamos dentro.


Parte trasera llena.
Parte trasera medio llena.
 Y así de bonita queda por delante con ese estampado de leopardo.
Parte delantera.

 Después de probar el sistema y comprobar que cumplía su función a la perfección y que era muy cómodo decidí hacer más por encargo, y las siguientes tuvieron un mejor acabado :). Aquí os dejo una muestra.
Esta tiene doble bolsillo interior. También las puedo hacer con algún bolsillo con cremallera, al gusto del usuario.


Interior.
Parte trasera llena.
Parte trasera medio llena.
Parte delantera.

 Yo ya no fumo, hace mucho tiempo que lo dejé, pero aún guardo la bolsa original con una muestra y sigo confeccionando bolsas por encargo.

B.J.D.

domingo, 17 de marzo de 2013

Percha forrada con trapillo.

Hoy os voy a dejar el primer tutorial por si queréis hacerlo la tarde del domingo. Es muy sencillo y útil y además queda muy resultón :). 

El otro día fui a colgar una blusa en mi armario pero no tenía la percha adecuada para que no se resbalara así que decididí forrar una con trapillo.
El trapillo es, como su propio nombre indica trapo. Suele ser una tira de trapo con la que luego se puede tejer o hacer infinidad de cosas. Toda la vida hacer cosas de trapillo fue la manera de aprovechar trozos de tela que ya no servían, de eso están hechas las jarapas, por ejemplo. Actualmente se puede encontrar en mercerías grandes, tiendas de manualidades y tiendas online rollos de trapillo de muchos colores, son largas tiras de tela de algodón y/o licra. Yo soy partidaria del reciclaje así que este trabajo lo he hecho con un trozo de camiseta blanca que tenía por ahí. Aquí os dejo el proceso.

1º. Buscamos una camiseta que no usemos y no nos importe destrozar, como por ejemplo esas camisetas de publicidad que nos regalan tipo "Bar Paco" y nunca nos ponemos. Las mejores son las que no tienen costuras laterales, de esa manera puedes hacer tiras más largas y evitar los empalmes. La mía tenía costuras así que he utilizado la parte de la espalda cortando en espiral hasta llegar al centro. Podéis hacerlo también con camisetas de colores y si solo tenéis en blanco las podéis teñir.

 
2º. Cortar la camiseta en una tira contínua procurando que sea toda más o menos del mismo ancho. Si no tenéis buen pulso podéis hacer la línea con un lápiz, jabón de sastre o cualquier medio con el que podáis marcar la tela pero que se quite después. Hay unos rotuladores Pilot ideales para estas cosas porque su tinta desaparece con calor, marcan muy bien y luego solo hay que pasar un poco la plancha para que no quede ningún resto. Yo la corté a pulso.


 
3º. Hacemos un ovillo con la tira de trapillo para poder trabajar mejor con él y que no se nos enrede y buscamos la percha que queramos forrar. Yo encontré una viejísima por casa pero bastante resistente y con la forma que me gusta. Se puede utilizar cualquier tipo de percha, de plástico o de madera.

 
4º. El siguiente paso es darle vueltas con el ovillo de trapillo hasta que ya no se vea ni un trocito de percha. Yo empecé atando un extremo a la parte metálica y avanzando hacia un hombro. Los hombros los forré previamente con trozos de manga de la camiseta para hacer más sencilla la tarea y los sujeté al enrollar el trapillo. Luego hacia el otro hombro y el centro para el final. Según vas enrollando vas viendo la forma de echar la hebra que te pide la percha. Acabamos atando otra vez en la parte metálica y ya tenemos nuestra percha momificada :P


 
5º. Le podemos poner un adornno para personalizar nuestro trabajo y dejarlo más chulo. Yo le he puesto un lazo también de trapillo en verde del remate que tenía la camiseta que he utilizado en las mangas.


 
6º. Et voilà! Aquí tenemos la vieja percha remozada y cumpliendo su misión que es que la blusa no se resbale y mantenga la forma adecuada.
Este trabajo también lo podéis hacer con tiras de tela estampada que tengáis por casa, lazos de raso (aunque estos quizá resbalen un poquito), cinta de algodón, lana o lo que se os ocurra, incluso si la percha es fina se puede poner debajo una capa de miraguano o espuma para engrosarla. Espero que os haya gustado y os sea útil.


Más adelante pondré más ideas para realizar con trapillo y/o reciclar cosas que tengamos por casa.

B.J.D.

viernes, 15 de marzo de 2013

Amigurumi

¿Conocéis el amigurumi?

Amigurumi es una técnica de origen japonés que consiste en tejer pequeños muñecos mediante técnicas de croché o ganchillo. Los amigurumis toman forma principalmente de animales adorables como ositos, conejos, gatos o perros, pero también se suelen crear otros muñecos con formas variadas como comidas, plantas, e incluso accesorios como bolsos, bisutería, etc.* (*Sacado de la Wikipedia)

Para introducirme en esa técnica empecé por algo sencillito. Hice un corazón otoñal y se lo regalé a una persona que fue muy importante para mí :).


La técnica amigurumi ofrece infinidad de posibilidades a la hora de crear cosas diferentes y divertidas, los puntos que se utilizan son sencillos y una vez que consigues soltura a la hora de aplicar los aumentos y disminuciones y calcular cuantos puntos se necesitan para cada cosa serás capaz de crear lo que te propongas. Mientras tanto puedes aplicar los patrones que ya están hechos y empezar a tejer tus propios amigurumis.
Más adelante pondré más ejemplos de los que yo he tejido y algún patrón sencillo para que practiquéis.

 

Mi primer tocado

Después del curso de sombrerería con Biliana Borissova tenía mucha información, muchas ideas y muchas ganas de llevarlas a cabo así que me puse manos a la obra en mi tallercito y esto fue lo primero que saqué.
Es un tocado hecho con base de tarlatana forrado con tela, el lazo es de raso. Me apetecía hacer un tocado chic, rollo francés con redecilla y todo y esto es lo que salió.



Mirad lo bonito que queda puesto.
Muchas gracias a Laura por servirme de modelo.






Aprendiendo sombrerería.

Como técnico de vestuario teatral he aprendido a hacer muchas cosas relacionadas con el vestuario de época, pero nunca había hecho sombreros de alta costura y era algo que me apetecía un montón aprender así que me puse a buscar quien me enseñara y encontré a una gran profesora, Biliana Borissova.

Biliana es una gran artista que ya ha colaborado con grandes diseñadores como Maya Hansen o Ion Fiz y fue un honor conocerla y empaparme de sus enseñanzas.
En un curso intensivo de 20 horas me enseñó diferentes técnicas para tratar fieltro, parasisal, sinamay, tarlatana, tela, plumas, hacer flores y diferentes adornos. Un curso muy completo para poder iniciarse en el mundo de la sombrerería, a partir de ahí la práctica es la mejor forma de aprendizaje.

Aquí os dejo la foto de las piezas que terminamos.

http://www.bilianaborissova.com/

Y esta soy yo luciendo algunas de ellas :).