La polémica de las tallas en las firmas de ropa de prêt-à-porter sigue estando en auge. Hay marcas de ropa juvenil que siguen sin hacer nada más grande que una talla 40, cuando son muchas las chicas y mujeres jóvenes con una talla más grande que esa.
Por otro lado las pocas marcas que hacen ropa para chicas más grandes que una Barbie suelen tener un estilo más adulto, más serio, que no es del gusto de la mayoría, o al menos del mío.
El otro día decidí darme una vuelta por las rebajas, si normalmente es difícil encontrar talla, en rebajas es peor, aún así estuve echando un vistazo y encontré unos pantalones que me encantaron. Hacía tiempo que quería unos pantalones rojos y estos tenían que ser míos, pero, por supuesto, no los había de mi talla. Después de valorar la situación, la prenda y el precio decidí llevármelos, algo haría con ellos.
Como siempre guardo todo tipo de telas y restos de otras prendas tenía parte de otro pantalón que me sirvió para aumentar este un par de tallas, y este fue el resultado.
La calidad de la foto no es muy buena, pero se aprecia bien la diferencia.
Me gustó la idea de poner el aplique en negro porque estiliza y queda más original.
Además recuperé la cremallera roja del bajo y la puse en medio de la parte negra.
Pues ya que estaba metida en faena empecé a buscar pantalones que tenía guardados y que hacía tiempo que no me ponía. Encontré unos negros que me quedaban pequeños la última vez que me los probé. La primera sorpresa agradable fue que ya me quedan bien, el sistema de control de peso funcionó a la perfección. Como eran muy sosos y ya tengo otros pantalones negros lisos, decidí llevar a cabo una idea que tenía desde hacía tiempo. Le puse unos apliques en las rodillas y tachuelas, como eran muy anchos los estreché de la rodilla para abajo y los dejé pitillo y para que fueran más cómodos les puse una cremallera en el bajo. He aquí el resultado.
Pues ya que estaba metida en faena empecé a buscar pantalones que tenía guardados y que hacía tiempo que no me ponía. Encontré unos negros que me quedaban pequeños la última vez que me los probé. La primera sorpresa agradable fue que ya me quedan bien, el sistema de control de peso funcionó a la perfección. Como eran muy sosos y ya tengo otros pantalones negros lisos, decidí llevar a cabo una idea que tenía desde hacía tiempo. Le puse unos apliques en las rodillas y tachuelas, como eran muy anchos los estreché de la rodilla para abajo y los dejé pitillo y para que fueran más cómodos les puse una cremallera en el bajo. He aquí el resultado.
La verdad es que las fotos no hacen justicia de lo bonitos que quedan puestos y a falta de alguien que me sacara la foto me saqué un par de ellas a la pierna para que veáis como quedan.
A ver si para el próximo post dispongo de una cámara mejor.
¿Qué os ha parecido?¿Os han gustado estos trabajos?
B.J.D.
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